Alberto Sordi

Uno de la comedia cinematográfica más cautivadora y talentosa de Italia estrellas, veterano italiano Alberto Sordi era conocido por satiriza las costumbres sociales de su país en acres negro comedias, cuentos farsa y drama sombrío. Él, junto con sus compañeros, Vittorio Gassman, Ugo Tognazzi y Nino Manfredi, podría decirse que representan lo mejor de la historia del cine italiano de posguerra. Nacido en Roma el 15 de junio de 1920 en el barrio de Trastevere, Sordi creció en una familia musical, su padre es una de la tuba de la ópera de Roma. Un niño del coro de la Capilla Sixtina, más tarde entrenó para el teatro en Milán pero regresó a Roma para trabajar en radio y salas de musicales de comedias. En los treinta encontró el camino al cine como extra. Su primer papel importante fue en los tres pilotos (1942), una película de guerra fascistas, pero no golpeó al estrellato internacional hasta una década más tarde cuando protagonizó películas tempranas de Fellini el jeque blanco (1952) y los inútiles (1953). Los títulos de algunos de sus personajes más prolíficos fueron tan simples como sus títulos: el seductor, el soltero, el marido, el viudo, la policía de tránsito y el moralista. La mayoría de sus protagonistas graciosamente, pero no siempre agradable, estereotipados los peores atributos de los hombres italianos y de la sociedad, sin embargo, muchas de sus películas son incomparables en calidad y considerados obras maestras. Sordi fue a estrella, dirigir y escribir más de 150 películas. Nunca casado y bastante introvertido, disfrutó de una vida tranquila y solitaria personal. En su 80 cumpleaños, fue nombrado alcalde de Roma para el día. En 2002, después de 190 películas, él anunció su retiro y murió de un ataque al corazón al año siguiente en 82 años de edad.