Jerusalem

Eraclius patriarca de Jerusalén (ca. 1128-1190/1) era originalmente de Francia y estudió derecho en la Universidad de Bolonia. Llegó a Jerusalén en algún momento antes del 1168 y fue ordenado a patriarca en 1180. En 1184, Eraclius viajó a Europa con Roger de Moulins (el Gran Maestre de los caballeros hospitalarios) y Arnold de Torroja (Gran Maestre de los Caballeros Templarios), buscan ayuda en la resolución de la crisis de sucesión que se avecina para el Reino de Jerusalén. Ellos tuvieron éxito en recibir una promesa de hombres y dinero de Philip II de Francia, pero no pudieron convencer a Enrique II de Inglaterra para regresar con ellos (aunque había sido forzada a seguir cruzada como parte de su penitencia por el asesinato de Thomas Becket años antes). Por el momento Eraclius regresó a Palestina en tarde 1185, Rey Balduino IV era ya muerto y había sido sucedido por su sobrino de nueve años de edad, Balduino V, quien a su vez murió al año siguiente. Cuando murió Balduino V, Sibylla, padre y su madre paso-Guy de Lusignan entró en la ciudad con una gran custodia armada. Eraclius junto con muchos de los nobles presentes estaban dispuestos a aceptar tipo (un caballero de relativamente bajo del nacimiento) como su nuevo rey. Se alcanzó un acuerdo por el que Sibylla (quién había sido la hermana del rey Baldwin V y la hija del rey Amalric) podría ser coronada reina si primero divorciaría tipo. Sibylla accedió con la disposición que luego se le permitir a casarse con el hombre de su elección. Una vez coronado, anunció a la conmoción y consternación de Eraclius que deseaba casarse de nuevo tipo. Saladino (ayyubí Sultán de Egipto y Siria que reinó desde 1174-1193) hubiera removilizado recientemente su ejército contra los cruzados, y en el año 1187, rodeó al ejército cruzado a las afueras de Tiberias en la batalla de Hattin, matando a la mayoría del ejército, matando a muchos de sus líderes y aun teniendo tipo rey él mismo cautivo. La pérdida de la mayoría de los militares más izquierdas de las tierras controladas cruzado (incluyendo la ciudad de Jerusalén) indefensos. Después de la batalla, un señor llamado Balian de Ibelin, uno de los pocos que sobrevivió y escapó de la batalla, llegaron a Jerusalén. Había venido a rescatar a su esposa e hijos del ejército Saladins antes de que llegaron a sitiar la ciudad. Aunque la ciudad estaba en una situación desesperada, y la gente le pedí su ayuda, se negó. Para cruzar las líneas musulmanas y llegar a la ciudad, había pedido a un juramento a Saladino, que simplemente llevarse a su familia y nunca tomar las armas contra Saladino. Eraclius intervino. Como representante de Dios en la tierra, él absolvió Balian de su juramento, diciendo que era más importante permanecer y defender la ciudad. Él también tenía toda la plata despojada de las iglesias con el fin de atacar las monedas que podrían ser utilizadas para pagar los defensores. Eraclius finalmente se dio cuenta que los citys derrota era inevitable, y convencido Balian para negociar una paz con Saladino, por el bien de la gente y un acuerdo fue alcanzado por que la gente de la ciudad podría ser rescatada (en lugar de ser vendidos como esclavos). Los ciudadanos más ricos podrían rescate por ellos mismos y Eraclius y Balian organizado y pagado personalmente en un fondo de colección para ayudar a pagar los ciudadanos pobres. Criaron dinero suficiente para rescatar a 18.000 personas, pero este todavía izquierda 15.000 que no podían ser rescatados. Eraclius y Balian se ofrecieron a Saladino como rehenes a celebrarse en lugar de estas personas hasta que podría recaudar el resto del dinero, pero Saladino se negó y vendió esas 15.000 personas a la esclavitud. De aquellos que podrían ser rescatados, fueron escoltados pacíficamente hacia el mar por ejército Saladins en tres columnas. Eraclius y Balian personalmente dirigieron la última de estas columnas fuera de la ciudad. Después de esto, Eraclius encontró refugio en Antioquía. Luego viajó a Acre (que había sido tomada por el ejército Saladins) y participado en el asedio de la ciudad, que reforzó la confianza entre los cristianos. Aunque Ricardo I de Inglaterra podría llegar a Acre en el verano de 1191 a la cabeza de la rama de Norman/Inglés de la tercera cruzada y tener éxito en la toma de la ciudad de vuelta para los cristianos, la enfermedad había barrido por el campamento cruzado en el invierno anterior, matando a muchas personas, incluyendo Eraclius.