Esto es por un autodenominado hipster de Nueva York que se paga una sorpresa y bastante inoportuna visita por su primo Húngaro casi dieciséis años de edad. De hostilidad inicial y la indiferencia un extraño afecto crece entre los dos exiliados. Debido a la total aburrimiento deciden visitar a su tía en los páramos de Cleveland y luego proceder a la soleada Florida donde pierden todo su dinero y sin querer ganar una fortuna. Con un giro irónico final, que son al final, vuelta donde comenzaron.