Después de muchos siglos, Hércules se aburre viviendo en el Olimpo (el hogar de los grandes dioses griegos) y deciden mudarse a... Nueva York. Pero obviamente, no es fácil para un hombre que vivió en la antigua Grecia acostumbrarse a la vida moderna. Así, las cosas se ponen un poco difíciles, especialmente cuando Zeus envía unos dioses para traer a su hijo semi-Dios volver al Monte Olimpo.