Populaire (2012)
Sí, lo sé, soy una romántica. No puedo evitar sentir cosquillas en el estómago cuando el chico declara su amor o emocionarme con un final feliz con beso incluido. Pero he de admitir que, en el cine, no corren buenos tiempos para los románticos. No si somos de los que pedimos algo más que cuatro miraditas, las mismas frases de siempre y un final previsible. Porque esos ingredientes los encontramos todas las semanas en la cartelera y a cada nuevo estreno que llega nos convencen menos. Por eso, qui ...