Seguro que la gran mayoría de nuestros lectores han oído hablar de los Premios Príncipe de Asturias, esos galardones que una fundación concede a distintos personajes de todo el mundo que destacan por su contribución a la ciencia, el arte o el bienestar social. Algunos los conocen como los 'premios Nobel españoles' y se entregan en el teatro Campoamor de Oviedo.
Pero aunque los Premios Príncipe de Asturias son de sobra conocidos y casi todos podemos nombrar a uno o varios de los galardonados (Woody Allen, J. K. Rowling, la selección española de fútbol...), una de las categorías, el reconocimiento al Pueblo Ejemplar, pasa bastante desapercibida. Al menos más allá de las fronteras asturianas, ya que se trata de un premio que se concede únicamente a una población o comunidad de Asturias y cuya ceremonia de entrega tiene lugar al día siguiente de la gala en Oviedo, cuando los flashes de las cámaras ya se han ido.
Recientemente se ha conocido el ganador de 2014, Boal, una pequeña localidad del interior asturiano. Y no he encontrado mejor excusa que esa para recordar algunas de las comunidades y pueblos ficticios que hemos conocido en el cine y que podrían aspirar sin ningún rubor al premio al Pueblo Ejemplar.
El título reconoce "la defensa de sus más nobles valores, su entorno natural o ecológico, su patrimonio histórico, cultural o artístico, o en la realización de obras comunes u otras manifestaciones de solidaridad extraordinaria". Así pues, echémosle imaginación, ¿a quién le darías tú el premio?
1. La comunidad educativa del Colegio Hogwarts de Magia y Hechicería ('Harry Potter y las Reliquias de la Muerte, Parte II', 2011), por hacer un frente común de profesores, alumnos y padres ante la amenaza de Voldemort y sus secuaces cuando la probabilidad de éxito era mínima y no rendirse, ni siquiera cuando el 'elegido', Harry Potter, parecía haber muerto.
Nunca un colegio estuvo tan unido
2. La ciudad de Hill Valley (trilogía de 'Regreso al futuro', 1985-1990), por proteger su patrimonio histórico a lo largo de las décadas. Ejemplos son el reloj que preside el Ayuntamiento y que sigue allí a pesar de que lleva parado desde 1955, el parque que se localiza frente al edificio y que no ha cedido a la burbuja inmobiliaria y el local de la esquina que durante más de medio siglo ha mantenido su carácter de negocio de hostelería.
Esta maqueta también forma parte del patrimonio de Hill Valley
3. El pueblo de Rohan ('El señor de los anillos: Las dos torres', 2002, y 'El señor de los anillos: El retorno del Rey', 2003), por olvidar viejos rencores y responder a la llamada de auxilio de una ciudad vecina aun sabiendo que el peligro era mortal.
¿Quién no ha soñado con visitar el auténtico Rohan en Nueva Zelanda?
4. Los habitantes de Isla Mema ('Cómo entrenar a tu dragón', 2010), por dejar a un lado sus batallas contra dragones y reconvertirse en una comunidad amiga de esta especie, donde sus vecinos han pasado de matar dragones a domesticarlos.
Así de lejos, Isla Mema da miedo. Y con razón
5. Sion ('Matrix reloaded' y 'Matrix revolutions', 2003), la última ciudad humana en el planeta Tierra que no ha sucumbido al control de las máquinas, por haber resistido la dominación durante tantos años para, en el momento decisivo, reunir el coraje necesario y prestar batalla en su propia casa con la certeza de que si el Elegido, Neo, fracasaba, ellos también lo harían.
El pueblo de Sion se prepara para la batalla
¿Se os ocurre algún otro pueblo o comunidad que merezca el premio?