Christopher Ahuja

Ejecutante de la película de potencia capaces de trabajar intensamente conmovedora que ha ido fortaleciéndose durante su joven y prometedora carrera como actor. Nacido en California Christopher Ahuja es el hermano gemelo fraternal de director, productor y escritor, Mike Ahuja. Christopher había perfeccionado su arte con el aclamado y distinguido actuando a entrenador Susan Batson. Su primera aparición en cuento noir de Josh Evans, 'Jake Lead'; jugando a moralmente corrupto, Rolando Montana. Pronto después, Christopher comenzó a colaborar en la historia de amor surrealista de su hermano; 'Amor enfermos diarios'. Fue durante este proceso de producción larga que Christopher comenzó a prepararse para su primer papel protagónico. Christopher asumió el papel de Ethan Vega, un traficante de drogas buscando amor y redención, frente a James Russo y Maggie Hai-Uyen desafiante. Después de amor enfermo diarios, Christopher buscó diversos papeles que desafiaba a su actor, tanto profesionalmente como artísticamente; trabajar con el cineasta mexicano Alejandro Sugich asumiendo el rol protagónico de Abdul (2006); un terrorista rico e inseguro, cuestionando sus motivos y creencias. Aventurarse hacia adelante tomando el papel principal en Cyrus Jennifer Ruiz; jugando a Ted Sullivan, un chico joven de Kentucky buscando complacer a su mentor gángster, frente a John Sterling Carter. Nunca el actor tímido lejos de riesgos, Christopher Ahuja asumió el papel complejo e inquietante de Jaleel Moosavi; un camarógrafo ansioso por video la muerte del secuestrado periodista Sara Brown, en Kevin Shulman, Eyes de Samir, el (2006), frente a Tony Todd. Christopher comenzó un período de intensa preparación para su personaje, aprendiendo a hablar Farsi y estudiar la cultura del miedo. Sentido de Christopher Ahuja del personaje y la historia es lo que lo impulsa del material escrito. Habiendo sido entrenado extensivamente y exclusivamente con Susan Batson los últimos tres años, dedicando su vida al arte de la narración. Más allá de la vulnerabilidad, la rabia, el encanto, siempre hay la pasión que conduce cada actuación única de Christopher Ahuja.