David

En el no-tan-lejos futuro se han fundido los casquetes polares y el consiguiente aumento de las aguas del océano se ha ahogado todas las ciudades costeras del mundo. Retirada al interior de los continentes, la raza humana sigue avanzando, llegando al punto de crear robots realistas (llamados mechas) para su servicio. Una de las empresas productoras de mecha construye a David, un niño artificial que es el primero en tener sentimientos verdaderos, especialmente un amor interminable por su 'madre', Mónica. Mónica es la mujer que lo adoptó como un sustituto de su verdadero hijo, quien permanece en crioestasis, afectados por una enfermedad incurable. David está viviendo felizmente con Mónica y su marido, pero cuando su hijo vuelve a casa después de una cura es descubierta, su vida cambia radicalmente.