En la década de 1930 Nueva York Orson Welles intenta un musical de la etapa en una huelga de acero bajo el programa Federal de teatro pese a las presiones de un establecimiento temeroso de disturbios industrial y actividad roja. Mientras tanto Nelson Rockefeller obtiene el vestíbulo de la sede de su empresa decorado y una condesa italiana vende pinturas de Mussolini.