Amélie decide cambiar su vida (el mismo día que Lady Di fallece) cuando encuentra una caja llena de recuerdos de hace 40 años. Amélie busca al dueño de la caja para entregársela y si él se alegra, decidirá dedicar su vida a ayudar a los demás.
Me gusta mirar hacia atrás en la oscuridad y ver la cara de los espectadores. También me gusta descubrir los detalles que nadie más ve. En cambio odio las viejas películas cuando el que conduce, nunca mira a la carretera.
La vida no es más que un interminable ensayo de una obra que jamás se estrenará.
Son tiempos difíciles para los soñadores.
Es curiosa la vida. Cuando eres niño, el tiempo no acaba de pasar, y luego sin darte cuenta tienes 50 años, y de la infancia lo único que te queda cabe en una cajita oxidada.