Segunda de las películas que conforman la trilogía del cornetto protagonizadas pro Simon Pegg y Nick Frost.
El agente de policía de Londres Nicholas Angel (Simon Pegg) es un agente excepcional, tan bueno en su trabajo que hace quedar mal al resto de policías de Londres, por lo que sus superiores le destinan al pueblo con menor indice de criminalidad del país para que deje de llamar la atención.
Pero solo un agente tan excepcional como él podría notar que en un pueblo donde nunca pasa nada, algo esta ocurriendo en la sombra, y es que su llegada revoluciona a los habitantes del pueblo y poco a poco una serie de desafortunados incidentes con victimas mortales conseguirá sacar lo mejor de él y de su nuevo compañero el agente Danny Butterman (Nick Frost).