Después de que Nick es despedido de su trabajo como vendedor, sobre todo debido a su afición por el alcohol, él viene a casa y encuentra que su esposa ha pateado él y todas sus cosas de la casa y en el césped delantero. Está muy concentrado en sentado en su silla, bebiendo cerveza, sobre el césped. Su amigo policía, Frank García, cree que al menos debe pretender tener una venta de garaje que sea legal. Poco a poco empezó a hacer amistad con un chico de barrio que necesita algo que hacer, y una mujer embarazada que acaba de mudarse al otro lado de la calle y Nick encuentra adelante y vender todas sus cosas.