La pareja de clase media Linda Hanson (Sandra Bullock) y Jim Hanson (Julian McMahon) vive una relación destructiva y ruinosa con sus dos hijas en su casa de los suburbios. Un jueves por la mañana, el sheriff local, el sheriff Reilly (Marc Macaulay) visita a Linda y le dice que su esposo murió en un accidente de coche el día anterior.
A la mañana siguiente, cuando Linda se despierta, encuentra a Jim sano y salvo en casa. Al día siguiente, se da cuenta de que sus días no siguen un orden. Su familia y amigos no la creen y piensan que está loca.