Tres bodas con Inma Cuesta
Una calificación del calibre de “el mejor primer plano del cine español en los últimos veinte años”, sin duda provoca un importante vértigo. Nada más leerla, seguro que cada uno de nosotros rebusca en su memoria cinematográfica en un intento por encontrar a él o la responsable de semejante calificativo. Puede que algunos hayan escogido a Elena Anaya y su cautivadora mirada de ojos inmensos, otros tal vez se hayan decantado por el rostro angelical de Leonor Watling, mientras que para ...