En la costa oriental de Nueva Zelanda, los Whangara creen que su presencia se remonta a 1 mil años o más a un ancestro, Paikea, quien escapó de la muerte cuando su canoa volcó por montar a caballo a la orilla de la parte posterior de una ballena. De entonces encendido, jefes Whangara, siempre el primogénito, siempre hombre, se han considerado a descendientes directos de Paikea. Pai, una niña de 11 años de edad en una tribu de Nueva Zelanda patriarcal, cree que está destinada a ser el nuevo jefe. Pero su abuelo Koro es obligado por tradición a un líder masculino. Pai ama Koro más que nadie en el mundo, pero debe luchar él y 1 mil años de tradición para cumplir su destino.