Bibi Andersson

Sus sueños artísticos llegaron temprano en la vida y además fueron apoyados por su más vieja hermana Gerd Andersson quien se convirtió en una bailarina de ballet en la Royal Opera House e hizo su debut en 1951. Bibi, del otro lado, tuvo que conformarse con papeles y comerciales. Debutó en Dum-LDM (1953), jugando contra Nils Poppe. Finalmente, fue capaz de comenzar en la escuela de actuación del teatro real dramático en 1954. Una breve relación con Ingmar Bergman hizo dejar la escuela y seguirlo al teatro de la ciudad de Malmö, donde él era director, actuando en obras de agosto Strindberg y Hjalmar Bergman. Bergman también le dio una pequeña parte en sus comedia sonrisas de una noche de verano (1955) y papeles más grandes en sus fresas salvajes (1957) y el séptimo sello (1957). Desde el 1960 tiene ofertas del extranjero, con mejor resultado en que nunca te prometí un Rose Garden (1977). Durante la guerra civil en Yugoslavia ha trabajado con varias iniciativas para dar a la gente de teatro Sarajevo y otras formas de cultura.