El condensador de fluzo, Hill Valley, Marty McFly... son iconos de la cultura pop y de nuestra memoria audiovisual, sobre todo para quienes crecimos en los 80 con ansia de aventuras y ganas de echar a volar la imaginación. La culpa la tiene 'Regreso al futuro' (Back to the future, Robert Zemeckis, 1985), esa maravilla del cine de aventuras que sentó las bases de los viajes en el tiempo para regalarnos emoción, diversión y una banda sonora inolvidable. La película cuenta la historia de Marty McFly, un adolescente que viaja 30 años atrás en el tiempo y evita el primer encuentro de sus padres, por lo que a partir de ese momento hace todo lo posible para que se enamoren y así asegurar su existencia.
Ingeniosa, mágica, adictiva... son sólo algunos de los calificativos para definir uno de los títulos que más culto ha generado en la historia y que dio lugar a dos secuelas casi tan maravillosas como la original que ya comenté en su día ('Regreso al futuro II' y 'Regreso al futuro III'). Hoy me toca hablar de la primera pero no quiero perderme en elogios y recuerdos. Así que iré directa al grano: 35 razones por las que 'Regreso al futuro' es y probablemente será mi película preferida de todos los tiempos.
Doc y Marty, Christopher Lloyd y Michael J. Fox, un dúo inolvidable
1. No hay mejor manera de arrancar una película sobre viajes en el tiempo que con multitud de relojes.
2. La música compuesta por Alan Silvestri: es memorable, acentúa la tensión de la trama porque recuerda más al género del terror que a la ciencia-ficción y suena en los momentos precisos (la primera vez que la escuchamos es cuando aparece el DeLorean, a los 18 minutos de metraje).
3. La presentación de Marty McFly: primero vemos su monopatín, luego las zapatillas, más tarde de espaldas y finalmente de frente. Genera intriga y, además, aporta toda la información que necesitamos saber del héroe: es rebelde, confiado y amante de la música.
4. La plaza de Hill Valley, que con la trilogía completa y sus diferentes versiones (1955, 1985 y alternativa, 2015) se convierte en una de las plazas más emblemáticas del cine, pero que es aquí, en 'Regreso al futuro', donde más apetece pasear por ella. Afortunadamente, se puede visitar en el Studio Tour de los Universal Studios de Los Ángeles.
Marty McFly viaja al Hill Valley de 1955
5. 'The power of love', de Huey Lewis, la canción que suena cuando Marty llega al instituto y que también interpreta frente al jurado del baile. Fue nominada al Óscar a la mejor canción original.
6. La sutil manera en que el guión de Bob Gale introduce la información relevante para que el espectador se adelante a los acontecimientos: la madre de Marty contando cómo se conocieron ella y su marido y señalando que "si no hubiera ocurrido, los hijos no hubieran nacido"; la colecta para arreglar el Reloj de la Torre... En 'Regreso al futuro' todo lo que se ve, se oye o se lee tiene un significado.
7. La expresión corporal de Michael J. Fox como Marty McFly, desde sus gestos de asombro hasta su peculiar manera de dormir.
8. La insólita relación entre Marty, un adolescente, y Doc (Christopher Lloyd), un científico loco. Tan inusual como creíble. Forman una de las parejas con más química del cine de aventuras.
9. Einstein, el perro. ¿Quién no lo adoptaría?
10. "¿Has construido una máquina del tiempo... con un DeLorean?", pregunta Marty. "Hay que hacerlo con clase", responde Doc. Y también procurando ser original y pensando en el potencial que esa 'máquina' tiene de convertirse en un icono. Además, la entrada en escena del DeLorean es espectacular.
El DeLorean
11. Otro icono más: el condensador de fluzo, que para ser exactos sería de flujo (la 'z' se debe a una mala traducción). Es el mecanismo que hace posibles los viajes en el tiempo.
12. La dinámica de los viajes en el tiempo: el futuro no está escrito, por lo que cualquier alteración del pasado modificará el presente. Una norma que ha servido de fundamento a la gran mayoría de los traslados temporales en la pantalla.
13. Aunque pueda viajar en el tiempo y conduce un DeLorean, a Marty McFly le toca caminar para llegar a Hill Valley.
14. El mensaje optimista que transmiten Marty, su padre y el camarero que será alcalde: con empeño se puede conseguir cualquier cosa.
15. Marty es conocido en 1955 como Calvin Klein porque es el nombre que llevan sus calzoncillos.
16. La dulzura de Lorraine, la madre de Marty a la que da vida Lea Thompson.
La dulce Lorraine
17. Lo moderno que era 1985 en 1955: Pepsis, televisores, secadores de pelo...
18. El divertido primer encuentro entre Marty y Doc en 1955, con el científico más preocupado por acertar en sus predicciones que por escuchar a ese extraño vestido de forma tan rara...
19. La broma protagonizada por el entonces presidente de Estados Unidos Ronald Reagan (en 1985), que tuvo que recibir el visto bueno de la Casa Blanca y encantó al mandatario. Cuando Marty le dice a Doc que procede del futuro, éste le pregunta quién es presidente en esa época y la respuesta, el actor Ronald Reagan, le parece por supuesto increíble.
20. 'Qué fuerte', esa expresión que Doc no entiende y que incluso le hace preguntarse si en 1985 existe algún problema con la gravedad (siempre me arranca una sonrisa).
21. El guiño al cine de extraterrestres: "Soy Darth Vader del planeta Vulcano". Referencia a 'La Guerra de las Galaxias' y 'Star Trek' que Marty le suelta a su padre para convencerlo de que invite a Lorraine al baile del instituto.
22. La persecución en la plaza de Hill Valley es una de las escenas de acción más recordadas, ingeniosas e imitadas (por la propia trilogía, de hecho) del cine de aventuras.
23. El brillantísimo Doc se disculpa ante Marty porque no ha tenido tiempo de crear la maqueta de la plaza de Hill Valley a escala ni de colorearla. ¡Si sólo con la idea de la maqueta nos ha dejado impresionados!
Doc y su amor por las maquetas (como se comprobará en la tercera entrega)
24. Es el científico quien pronuncia el nombre de la película hasta en dos ocasiones y, en ambas, se nos pone un poco la piel de gallina.
25. ¿Desde cuándo el hombre del tiempo acierta en sus predicciones? Una pregunta que Marty le lanza a Doc cuando éste señala que los pronósticos no hablan de tormenta y que sigue siendo válida casi 30 años después.
26. Lorraine bebe y fuma (y copia en los exámenes, pero eso pertenece a una escena eliminada del montaje final) y cuando Marty la reprende, ésta le replica que él suena "como su madre". Ironías de la vida.
27. El puñetazo que George McFly le asesta a Biff. Lo deseamos, vemos cómo la mano de George va tomando fuerza mientras en su cara se adivina la decisión... y finalmente Biff cae inconsciente. Sencillamente maravilloso.
28. El romance de George y Lorraine. Con muy pocos elementos y un par de interacciones, logra convencer hasta tal punto de que nosotros también sonreímos, como Marty, cuando vemos como él la levanta del suelo y, más adelante, se besan en el baile.
29. La "muy interesante" música que Marty McFly toca en el baile junto a los Starlighters (¿referencia al rayo, que en inglés se dice 'lightning'?)
Marty estrena el rock & roll con 'Johnny Be Goode'
30. La secuencia final del viaje de regreso al futuro: tensión y adrenalina a raudales a ritmo de la música de Alan Silvestri. Porque si algo puede salir mal, saldrá peor: el coche no arranca, el cable se suelta, Doc por poco cae de la torre... y el espectador clava las uñas en la butaca. Pero, por suerte, se obra el milagro y Marty regresa a 1985.
31. El grito de Doc cuando descubre que lo han conseguido.
32. Esos detalles que uno va descubriendo visionado tras visionado: el centro comercial ha pasado de llamarse 'Dos pinos' (Twin pines) a 'Un solo pino' (Lone pine) porque en el viaje al pasado Marty arranca uno de los dos árboles; la cornisa junto al reloj que rompe Doc en 1955 sigue rota en 1985 y, en la secuela, en el año 2015.
33. El 'cliffhanger' que iba ser un mero cierre divertido pero que al final cobró significado y generó dos películas más.
34. El 'to be continued' que veíamos antes de los títulos de créditos cuando ya se habían emitido las secuelas.
Marty, su novia Jennifer y Doc, hacia el año 2015. ¿Los veremos entonces?
35. Que a pesar de los años que tiene (29) y de las veces que la he visto (al menos otras tantas), 'Regreso al futuro' sigue enganchándome casi tanto como el primer día.